SUELO PÉLVICO REHABILITACIÓN

El suelo pélvicoes un conjunto de músculos situados en la pelvis y cierra la cavidad abdominopélvica en su parte inferior.

Es una estructura con forma de bóveda, muy parecida al diafragma a la que se la denomina también diafragma pélvico.

Los músculos que forman el suelo pélvico se pueden dividir en 2 grupos: los músculos superficiales del suelo pélvico y los músculos profundos del suelo pélvico.

✅ Los músculos superficiales del suelo pélvico son las musculatura más externa de la pelvis en su región inferior y en ella se sitúan el músculo bulboesponjoso, isquiocavernoso, esfínter de la uretra ( en la parte anterior ) transverso superficial y profundo ( en la media ) y el esfínter del ano ( en la posterior )

✅ Los músculos profundos del suelo pélvico están formados por el músculo coccígeo y elevador del ano. Este último está constituido a su vez por 3 músculos: pubococcígeo, isquiococcigeo e iliococcígeo.

 

La principal función del suelo pélvico es la de sostén de 3 órganos: la vejiga, el útero y el recto.

Estos órganos son de vital importancia por desempeñar las funciones urogenitales (como la micción), digestivas (como la defecación) y sexuales-reproductoras.

Elsuelo pélvico, además del sostén de estos órganos, se encarga del cierre de los esfínteres provocando disfunciones cuando éste se debilita o sufre alteración.

Las disfunciones del suelo pélvico afectan la calidad de vida de las personas que lo padecen y generan problemas psicosociales con altas repercusiones económicas.

Es por ello que el tratamiento con fisioterapia del suelo pélvico ha tomado tanta importancia en la sociedad donde cada vez hay más estudios científicos que nos lleva a tener un alto éxito en consulta.

Así mismo, es recomendable tratar las disfunciones pélvicaslo antes posible para no agravar síntomas y males mayores.

Hablamos de disfunción del suelo pélvico cuando existe una alteración de la función de algún órgano pélvico o tejido y no existe problema orgánico, es decir, estructural.

Se pueden clasificar de diferentes maneras, como puede ser por el médico especialista que lo diagnostica o por el campo al que pertenece, por ejemplo, la ginecología, urología…

Las disfunciones o patologías del suelo pélvico se pueden clasificar de la siguiente manera, según el órgano pélvico afectado o campo médico al que pertenece:

El fisioterapeuta de suelo pélvico es el especialista que que trata las disfunciones del suelo pélvico. 

Cada paciente padece una disfunción y circunstancias distintas en su día a día por ello es necesario realizar una valoración global para personalizar el tratamiento.

El primer día de consulta se interroga al paciente con una serie de preguntas para conocer la evolución de la dolencia o disfunción y saber todo aquello que le afecta en su vida.

Para ello disponemos de test y valoraciones.

Entre ellas encontramos:diario miccional, diario defecatorio, escala de Wexner, escala de St. Mark´s

Tras los test del suelo pélvico, pasamos a la valoración manual e instrumental de las estructuras implicadas en la disfunción o dolencia.

La valoración manual del suelo pélvico para el diagnóstico de la disfunción consiste en observar y palpar con las manos del fisioterapeuta la fuerza, sensibilidad, dolor y estado del tejido musculoesquelético.

Comenzamos con el paciente de pie y se le pide una posición relajada para observar cómo se encuentran los hombros, el abdomen, la pelvis y la columna.

La postura es la base para mantener una salud en el cuerpo. Es el pilar que favorece que nuestra musculatura se active y proteja los órganos y cavidades internas.

Una adecuada postura creará una normalidad en las presiones intraabdominales y que los músculos profundos, encargados de la estabilidad, se activen.

Desde esta posición se le pide una respiración para valorar si tiene un patrón respiratorio anormal que pueda alterar las presiones dentro de la cavidad abdominal y a su vez generar exceso de trabajo al suelo pélvico o empuje.

Se le pedirá también otras maniobras como la tos o crecer. Todas ellas con el mismo fin.

A continuación, el paciente se tumbará en la camilla y el fisioterapeuta valorará el diafragma. Para ello coloca sus manos debajo de las costillas del paciente y sentirá cómo se comporta éste cuando respira.

El siguiente paso es la valoración del abdomen donde el fisioterapeuta sentirá zonas de tensión, dolor, apertura de línea alba… y pedirá algún tipo de maniobra para conocer la funcionalidad del abdomen.

Por último, el profesional valora el suelo pélvico. Para ello, el paciente pedirá una flexión de rodillas del paciente y se colocará de frente para observar el periné en su totalidad. Así podrá observar: cicatrices, asimetrías, estado de la piel y la vulva. 

A continuación, se realiza el examen vaginal que consiste en testar el tono de los músculos del periné, la sensibilidad del paciente, el dolor, los reflejos, ver si existen prolapsos y cómo se comporta el periné cuando se solicitan ciertas maniobras a la paciente como la tos o el valsalva.

También se puede realizar una valoración instrumental del suelo pélvico para el diagnóstico de la patología concreta del paciente.

En ella, el fisioterapeuta contrasta con un aparato valores sobre el estado del tejido musculoesquelético e incluso puede aportarle mayor información que la obtenida con sus manos.

Uno de los equipos más importantes es la ecografía musculoesquelética utilizando la técnica RUSI, la cual evalúa morfología y funcionalidad de las estructuras.

Además, éste proporciona feedback visual al paciente para entender mejor su disfunción o la manera en que debe contraer la musculatura.

Una función complementaria de la ecografía es la de valorar el control motor del paciente.

Con toda esta información el fisioterapeuta podrá establecer un tratamiento personalizado y adecuado a la disfunción de suelo pélvico del paciente.

Se establecerán objetivos mutuos, en el que el paciente participará de forma activa en todo el tratamiento siguiendo las instrucciones indicadas por el fisioterapeuta, es lo que llamamos tratamiento conductual.

El paciente deberá realizar los ejercicios y los cambios de hábitos nocivos para su disfunción determinada. 

El suelo pélvico no trabaja de forma aislada sino que se relaciona con el diafragma y el abdomen para crear un movimiento coordinado y preciso que da equilibrio y eficiencia a todo nuestro cuerpo.

El diafragma es un músculo que separa el tórax del abdomen. Tiene forma de bóveda y su principal función es respiratoria en la fase de inspiración, de manera que éste se contrae para aumentar el espacio torácico y permitir la entrada de aire a los pulmones. Este descenso del diafragma provoca un aumento de presión en la cavidad abdominal que si no es compensada por la contracción del suelo pélvico y el transverso del abdomen puede provocar a largo plazo diferentes disfunciones.
En los casos que se realice ejercicio con intensidad o cualquier actividad que aumente la fase espiratoria, los músculos del abdomen se activarán y el suelo pélvico se contraerá también de forma refleja. Por tanto, el suelo pélvico está íntimamente relacionado con la respiración y el diafragma.

El diafragma es, por tanto, una de las estructuras anatómicas clave junto a la musculatura del abdomen para mantener una correcta normalidad en el suelo pélvico. Y juntos darán estabilidad al tronco para un movimiento óptimo del cuerpo.

Las disfunciones del suelo pélvico se pueden tratar con diferentes abordajes, uno de ellos es la fisioterapia de suelo pélvico.

Ésta es considerada como tratamiento conservador y, en la mayoría de las disfunciones, aparece en las primeras líneas de tratamiento de las guías médicas por su alto éxito en los resultados.

Eso se debe, en parte, a que la fisioterapia es una disciplina reeducadora que enseña al paciente a conocer mejor su cuerpo, cuáles son los hábitos saludables y las posturas que debe modificar en su día a día.

Además se trata de entrenar y mejorar el tejido que está causando la disfunción del suelo pélvico.

El urólogo es el médico que diagnostica y trata las patologías del aparato urinario de ambos sexos y el reproductor en el hombre.

Por ello, será el médico especialista en valorar las incontinencias urinarias en ambos sexos, la próstata y las disfunciones sexuales en el hombre. 

El urólogo dispone de diferentes recursos para el diagnóstico y conocimiento de las disfunciones del suelo pélvico.

Primero realiza un interrogatorio para conocer la historia clínica del paciente y a continuación podría entregar cuestionarios para que responda a ciertas preguntas.

Uno de los más conocidos es el ICIQ-SF, el cual identifica a las personas con incontinencia urinaria y el impacto en su calidad de vida.

Existe también el diario miccional el cual da conocimiento de la urgencia y frecuencia de la incontinencia o

el TEST DE BONNEY para ver la competencia del esfínter. 

Si el urólogo lo cree conveniente puede prescribir fármacos o pruebas complementarias, como estudios urodinámicos, para un estudio más completo.

Los estudios urodinámicos más utilizados son:

☑️ FLUJOMETRÍA, ☑️CISTOMETRÍA y ☑️ESTUDIO-REFLUJO.

Dependiendo de la disfunción y su gravedad el urólogo recomendará la cirugía como otro método de tratamiento.

El ginecólogo es el profesional especialista del aparato reproductor de la mujer, las mamas y las etapas más importantes de la mujer como es el embarazo o la menopausia.

El ginecólogo es el especialista que valorará las patologías y disfunciones que afecten en este área del cuerpo, como prolapsos del compartimento medio, disfunciones sexuales en la mujer… pero también es cierto que pueden especializarse en el campo del suelo pélvico y  valorar así otras disfunciones que lo afecta como prolapsos del compartimento anterior (cistoceles) o posterior (rectocele ).

La ECOGRAFIA es una de las pruebas más importantes en ginecología ya que muestra información de la pelvis tanto en estático como en dinámico proporcionando datos importantes para la valoración de patologías y disfunciones.

También prescribirá fármacos o recomendará cirugías según las circunstancias del paciente.

COLOPROCTÓLOGO Y SUELO PÉLVICO.

El coloproctólogo es el médico especialista que diagnostica y trata las patologías del ano, recto y colon.

Al igual que el resto de médicos, realizará una anamnesis en el que el paciente responderá a preguntas relacionadas con sus síntomas y elaborará una historia clínica.

Disponen de diferentes test y pruebas complementarias para obtener información más precisa de la disfunción pélvica que presenta el paciente.

Entre los test más utilizados está la

☑️ ESCALA DE WEXNER, ☑️ DE ST. MARK´S, ☑️ FISI o ☑️ EL DIARIO DEFECATORIO en el caso de incontinencias fecales.

Todos ellos para valorar la frecuencia, calidad de heces, gravedad de la disfunción y repercusión en la calidad de vida del paciente con incontinencia fecal.

Las pruebas complementarias serán también fundamentales para precisar el diagnóstico y gravedad de la patología o disfunción y así tomar decisiones del tratamiento adecuado para cada paciente.

Algunas de las pruebas utilizadas y más comunes para diagnosticar disfunciones de suelo pélvico son: ☑️ MANOMETRÍA ☑️ ANORRECTAL, ☑️ ECOGRAFÍA ENDOANAL, ☑️ EMG DE NERVIOS PUDENDOS, ☑️ VIDEODEFECOGRAFIA, ☑️ TEST DINÁMICO ☑️ RETENCIÓN  LÍQUIDOS Y ☑️ TIEMPO DE TRÁNSITO COLÓNICO. 

El coloproctólogo recomendará la cirugía en los casos que sea conveniente o prescribirá fármacos.

El fisioterapeuta de suelo pélvico es el profesional sanitario que trata las disfunciones del suelo pélvico y todas las estructuras que estén relacionadas con éste para su correcto funcionamiento.

El suelo pélvico no trabaja de forma aislada, sino que trabaja junto con otras estructuras de nuestro cuerpo como el diafragma, el abdomen y la columna lumbar.

Por ello será importante valorar y tratar el sistema en conjunto. 

El fisioterapeuta realiza también preguntas al paciente para conocer la historia clínica, al igual que el médico, y utiliza test para valorar la gravedad y la calidad de vida del paciente.

La valoración se basa en evaluar la funcionalidad de la musculatura del suelo pélvico y las estructuras vecinas con exploración visual, palpación manual y utilizando equipos que aporten información adicional como puede ser la ECOGRAFIA RUSI Y LA MANOMETRIA.

El tratamiento de la fisioterapia de suelo pélvico es totalmente conservador y puede realizarse como primera línea de tratamiento e incluso previo a cirugías.

El tratamiento será global, es decir, se trabajarán también otras estructuras ya mencionadas anteriormente para obtener los mejores resultados y se aplicarán técnicas manuales, equipamiento, ejercicio terapéutico y tratamiento conductual.

El psicólogo es el profesional sanitario encargado del cuidado de la salud mental de las personas. En algunos casos existe una relación directa de éste con las disfunciones del suelo pélvico y la figura del psicólogo será imprescindible para conseguir el éxito en el tratamiento.

Algunas disfunciones pueden estar provocadas o relacionadas con hechos traumáticos en la vida del paciente que incluso él mismo puede no ser consciente. Por ello, se realizará un trabajo multidisciplinar en el que el médico, el fisioterapeuta y el psicólogo tratarán en equipo y estarán alineados hacia un mismo objetivo: la recuperación del paciente.

El psicólogo es el profesional sanitario encargado del cuidado de la salud mental de las personas. En algunos casos existe una relación directa de éste con las disfunciones del suelo pélvico y la figura del psicólogo será imprescindible para conseguir el éxito en el tratamiento.

Algunas disfunciones pueden estar provocadas o relacionadas con hechos traumáticos en la vida del paciente que incluso él mismo puede no ser consciente. Por ello, se realizará un trabajo multidisciplinar en el que el médico, el fisioterapeuta y el psicólogo tratarán en equipo y estarán alineados hacia un mismo objetivo: la recuperación del paciente.

La pelvis masculina se diferencia de la femenina en la forma y en los órganos pélvicos que se encuentran en su interior.

✅ El hombre tiene un aparato reproductor con una próstata y la mujer el útero, con las trompas y los ovarios. 

Esta diferencia se debe básicamente a que la mujer está diseñada para gestar un bebe y dar a luz. 

Para ello la mujer posee un orificio adicional, la vagina, que será el canal por el que pase el bebe hacia el exterior en el momento del parto.

Tanto la existencia de este hiato como el mismo parto, que es un acto traumático para el cuerpo, genera que la pelvis femenina sea más vulnerable y desencadene mayores problemas y disfunciones pélvicas en mujeres.

Por tanto, las disfunciones en esta área serán diferentes en el hombre que en la mujer, donde las mujeres tienen mayor tendencia a padecer prolapsos y los hombres disfunciones por la próstata.

Por ello, el fisioterapeuta de suelo pélvico deberá tener una formación específica en el tratamiento de las disfunciones de suelo pélvico masculinas.